Nuestro primer viaje a Oceanía nos llevó hasta Nueva Zelanda, país de kiwis y ovejas, de El Señor de los Anillos, hermosos paisajes naturales y gentes con un acento inglés realmente difícil de entender.
Fue aquí donde contratamos por primera vez una autocaravana, y la experiencia nos gustó tanto, que años después, ya con el peque en nuestras vidas, decidimos comprar una caravana para viajar por Europa hasta que tenga una edad que justifique viajes más largos y que queremos que perduren en su memoria.
Aunque fuimos en Agosto, por lo que allí es pleno invierno, el bondadoso clima y la preparación del país para viajar con la casa a cuestas, nos hizo disfrutar como hobbits de todo el trayecto.