Lástima que Víctor tubo un percance en un tobogán y se lesionó en una rodilla, por lo que sólo pudo hacer 8 de los 14 barrancos que se curraron Quim y Jose. Aún así, tubieron la suerte de ver los restos de la lengua de lava humeante del volcán (no recuerdo el nombre), que había erupcionado este abril.
Además, nos trajo un curioso trocito de lava de la erupción, un trozo de coral que se encontraba en grandes cantidades en la arena de la playa porque un par de tsunamis había arrancado la mitad de la barrera coralina. A ésto añadir que en época de lluvias las instalaciones de los barrancos se las lleva el agua en muchos casos, que en los cauces caen piedras por doquier y que en una de las principales carreteras de la isla hay varios muertos al año por «PIEDRAS» que caen de la montaña y te chafan dentro del coche. En fin, paradisiaco!
Buenas vacances a tothom!!!!!!!!!