Llega la primavera a Ripollet City, y nuestro querido jardín nos brinda un espectáculo que no puede más que dejarnos anonadados. Nuestra mimosa del alma florece y explota en una orgía de color desenfrenado, mero inicio de lo que una temprana primavera nos va a deparar.Plantas crasas y flores perennes llevan unos días prometiendo espectáculo, y las flores anuales desperezan de su letargo invernal. El día empieza a alargarse y las temperaturas del mediodía, altas para lo que suele ser la época, invitan al noble deleite de la cervecita y los berberechos al abrigo del siempre bienvenido Sol de Invierno.
Qué maravilla! Qué deleite para los sentidos! Disfrutar de un jardín florido y dos hermosos compañeros peludos que te muestran cariño a todas horas. No se puede pedir más! …. Bueno …. Sí …. Yo agradecería en cierto modo NO SER ALÉRGICO AL POLEN NI AL PELO DE GATOOOO!No obstante, siempre hay alguien que pone cara de pedo ante tan magnánimos acontecimientos. Si no, echarle un vistazo a la carita de nuestra querida Ginger!
Killer Bonsái
Voy a permitirme un pequeño impás. Aconsejo visitar la Fira si eres amante de las plantas, ya que aunque aquí tratamos sólo el tema Bonsái, hay mogollón de paraditas con flores de todo tipo, cactus, árboles de jardín y, para los menos bucólicos, paraditas de papeo y birra. Además hay animalitos que hacen las delicias de los peques.
Bueno, volvamos al alien, perdón… presunto bonsái. Una vez lo tenemos en nuestro poder, hay que dejarlo en manos de alguien que vea más allá de donde los piltrafillas principiantes como yo imaginamos que se puede ver. Este es el paso más importante, pues de ello dependerá de que en un futuro obtengamos un bonito y estético bonsái.
Una vez que tenemos ya las indicaciones de lo que hay que hacer, empieza la operación «Cambio radical».
Nota: las imágenes que se muestran a continuación pueden herir la sensibilidad de algunas personas y la de todos aquellos seres del reino vegetal, que según la probabilidad obtenida de las ecuaciones de la mecánica cuántica en espacios Calabi-Yau apropiados, han podido desarrollar algo análogo a los ojos humanos.
Si he de ser sincero, diré que aparte de lo dolorosas que pueden ser las imágenes si, por ejemplo, imaginamos que en vez de un arbolito, esto fuera uno de tus huevetes, la indignación es mucho mayor cuando ves que después de serrar, pellizcar, cortar, transplantar etc…, tú vas, compras una plantita en la tienda, la tratas con todo el amor que puedes dar y la muy cabrita…. VA Y SE MUERE!!!!
Y aquí podéis ver el resultado final de la tarde. Sólo 2 palabras IM PESIONANTE!
El arroz coloca, lo juro!

Aquí podéis ver al cocinero… sí, sí,.. el de detrás de la barriga! Hubo un tiempo en que este recio muchachote trepaba como un campeón, y de echo él fue quien me inició en la escalada, pero pronto se pudo ver que le gustaba más el buen comer y los deportes de nieve, que esto de hacer la lagartija. La verdad es que como podéis apreciar, la cosa culinaria no se le da nada mal.
Los anfitriones fueron Santi y Melissa, y la idea surgió como hace más de dos años atrás. Así que tener cuidado con lo que habláis (sobretodo si se habla de comida) porque NUNCA olvidamos nada (excepto las aproximaciones a las zonas de escalada).
Aquí podéis ver a los comensales, exceptuando a mi amada Mel, que era la encargada de inmortalizar el momento. Y Claro, ya sabemos lo que pasa en estos casos: la paella, el vinito, el carajillo, los orujillos y gin-tonics para la digestión, etc… etc… Resultado: los comensales tan modositos que aparecen en la foto inicial acaban de esta guisa (mamá, cierra los ojos).
Conclusión: el arroz coloca!!!!