Camí de Ronda Altafulla – Tarragona

Ya va llegando el veranito y en breve el CER cerrará por vacaciones, pero no sin antes hacer nuestra típica cena de despedida de verano. Como siempre, para hacer boca, hacemos un pateo de poca dificultad; así no nos sentimos tan culpables después. Esta vez, escogimos el camino de ronda de Altafulla a Tarragona, 14 kms., que transcurren en su mayoría muy cerca de la línea de mar.

inicio

Dan ganas de llevarse uno

Empezamos a caminar

Empezamos a caminar

Sorpresa en la playa

Sorpresa en la playa

Empezamos a caminar en la playa de Tamarit, atravesándola hasta que llegamos al castillo del mismo nombre, lugar de celebraciones (intuimos que nada baratas).

Castillo de Tamrit

Castillo de Tamrit

Seguimos caminando bajo un sol que pega de verdad, ahora por un terreno de acantilados no muy altos pero bastante bonitos y tramos de pineda que nos otorgan un respiro a la sombra.

acantilado 1 acantilado 2Así llegamos a la Cala de La Mora, que cruzaremos para llegar a un masificado camping que por suerte nos permite pasar por el interior, bajo señalización hasta que llegamos a La Torre de la Mora, donde descansamos.

Torre de la Mora

Torre de la Mora

Entramos ahora en una zona boscosa muy chula, llamada Bosque de la Marquesa, en la que hay bastantes calas, la mayoría de ellas naturistas, siendo la más famosa la playa Waikiki, que se puede ver muy bien desde los acantilados del final.

Bosque de la Marquesa

Bosque de la Marquesa

mora 3 mora 4

Laura fotografiando chicos desnudos en la Playa Waikiki

Laura fotografiando chicos desnudos en la Playa Waikiki

Dejamos la cala y continuamos hasta que el bosque cesa y llegamos a La Playa Larga (casi 3 km), que bajo el sol achicharrante se nos hace larga… larga… Pero bueno, todo tiene su fin.

Refrigerando los Pirelli en la Playa Larga

Refrigerando los Pirelli en la Playa Larga

Ya no nos queda mucho para llegar a nuestro destino: una pequeña zona boscosa y llegamos al paseo, que en breve nos deja en una zona de duchas y aseos (cerrados por la hora), donde nos refrescamos para irnos al restaurante.

llegando llegando 2

Empieza a atardecer

Empieza a atardecer

barco

Una vez allí, empieza la fiestuqui… Ya sabemos que los menús de grupo no suelen ser muy buenos a no ser que se pague un pastón por ellos. Después de buscar y buscar una oferta que nos ofreciera ciertas garantías de calidad/precio, acabamos en el Hotel Urbis Centre.

restaurante

El intento de cocina de autor a precios moderados dejaron platos como éstos, para apaciguar nuestros rugientes estómagos.

Albóndiga nadadora (sí, solo había una)

Albóndiga nadadora (sí, solo había una)

Queda raro, pero es un cherry con brandada de bacalao

Queda raro, pero es un cherry con brandada de bacalao

Además, al final de todo me dieron un diploma por campeón.

¡Porque yo lo valgo!

¡Porque yo lo valgo!

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